Para la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (Cepal) se trata de la mayor crisis económica en un siglo para la región Americana.
Pese a que empieza a detectar señales positivas inesperadas, el Banco Mundial calculó que el Producto Interno Bruto del aérea caerá un 7,9% en 2020, un desplome sin precedentes en la historia reciente.
Pero Abhijit Surya, analista especializado en América Latina de la Unidad de Inteligencia Económica de “The Economist” advierte “Hay países que se van a recuperar muy rápidamente, como Chile o Uruguay, y otros que tienen muchos problemas que no lo lograràn superar hasta probablemente 2023 o 2024”.
En realidad, determinar cuándo un país se ha recuperado de una crisis no es sencillo y los economistas tienen diferentes ideas sobre cuáles son los indicadores que hay que observar para ello.
Uno de los que más a menudo se utilizan es el Producto Interno Bruto, el valor total de los bienes y servicios producidos en un país en un periodo determinado. Pese a las dudas que genera sobre el comportamiento de la economía el virus, para el que aún no hay disponible una vacuna efectiva, se espera que el PIB de la mayoría de los países latinoamericanos vuelva a crecer ya en el 2021.
En algunos países esa ardua senda hacia la recuperación de la riqueza podría ser aún más larga. Surya indica que “ a los países que puedan mantener por más tiempo los estimulos a la economía les ira mejor en la fase de recuperación”.
Como sucedió en otros lugares cuando el coronavirus golpeo a los países de la región, los gobiernos que pudieron permitírselo comenzaron adoptar medidas para apoyar a la economía, desde las ayudas directas a las familias puestas en marcha en Brasil por el presidente Jair Bolsonaro, hasta los programas de compra de deuda pública adoptados por los bancos centrales de Chile y Colombia.
El objetivo era apoyar el crecimiento y la actividad en un momento en el que el virus los deprimía sin piedad. Pero la persistencia de la pandemia obligará a los países a mantener este esfuerzo extra y nadie sabe por cuánto tiempo.
En palabras de Martin Rama, economista jefe de la región del Banco Mundial: “Cuando empezó la pandemia se aplicaron estímulos como si se tratara de un esprint; ahora vemos que va a ser más bien una maratón”.