Todos queremos vivir nuestro bienestar emocional, pero a veces sentimos que es algo imposible, como si no lo mereciéramos. Y así nos auto-castigamos y saboteamos para vivir sintiendo que nos estamos perdiendo algo, que la vida no es esto que vivimos cada día.
En este artículos daremos tres detalles que pueden ayudarnos en nuestra salud mental, aplicando cada una de ellas en nuestro diario vivir podemos vivir la vida plenamente siempre cuidando también nuestra alimentación, intentando salir de la rutina diaria.
La primera es la aceptación, esto va más allá de uno mismo para comenzar a aceptar todo lo que llega hasta ti. Y no siempre es fácil, porque la vida también nos trae retos y cosas desagradables.
Algo que puede ayudarnos mucho a aceptar las cosas tal y como llegan a mí, es saber que todo lo que vivo me ayuda a crecer. Y esto no solo es un pensamiento, es una creencia arraigada que debe de crearse en nosotros, afrontar los retos familiares o de otra índole que ayudan a madurar y convertirse en la persona que deseamos y que debemos ser a través de estas experiencias.
Confianza esta segunda clave, creo que es la parte más difícil del bienestar emocional, tener fe en nosotros mismos, en la vida, sabiendo que podemos afrontar todo lo que llegue. Pero creo que sin confianza no podemos aceptar del todo lo que vivimos y lo que hay en nosotros.
La confianza es saber que pase lo que pase saldremos adelante, por lo tanto debemos desarrollar una fe inquebrantable en nosotros mismos, apoyándonos cuando hacemos bien las cosas, pero también cuando cometemos errores. La confianza en ti es tu mayor tesoro, porque cuando te acompaña y la nutres con amor, eres capaz de alcanzar cualquier meta, de afrontar cualquier situación al tiempo que te sigues queriendo.
El tercer y último punto que debemos aplicar es fluir con la vida, esto suele aparecer de manera natural cuando nos aceptamos y cuando confiamos en nosotros mismos. Fluir supone ser flexible, estar abierto al cambio, escuchar lo que necesitas, lo que sientes y piensas cada día.
Sé que puede parecer muy difícil, pero cuando se vive en el presente, te escuchas y dedicas tiempo, esto surge de manera natural. Fluir con la vida también requiere desapego y abandono para observar lo que ocurre dentro y fuera de nosotros mismos.
Comienza por ti, porque tú eres importante. Identifica las cosas que te mantienen preso de una vida que no te apasiona y solo observa, no la juzgues como malas, no te juzgues a ti mismo. Recuerda que los reproches no tienen cabida en este nuevo tú, tan solo el amor cuidado y aceptación.
Cuando observas y detectas que te mantiene preso, decide conscientemente si quieres continuar así o no… Cualquier opción está bien, tan solo es ser claro de lo que sientes y necesitas para mejorar tu estado de ánimo. No olvides que eres libre de elegir.
