Vinicius Jr. ha sido reconocido por su afición como el Jugador Cinco Estrellas del mes de agosto. El delantero ha ganado este premio que le reconoce como el mejor jugador del equipo gracias al gran rendimiento que ha mostrado en el arranque de la competición doméstica.
El jugador brasileño analizó el próximo encuentro ante el Atlético de Madrid, que se jugará este próximo domingo en el Cívitas Metropolitano. “Estamos trabajando mucho para llegar bien al partido. Todo el esfuerzo que hemos hecho en la pretemporada cuenta y es la clave, además del trabajo y la experiencia mezclada con los jugadores más jóvenes”, afirmó Vinicius.
Además, el delantero brasileño confesó sus expectativas para esta temporada después de levantar la pasada Liga y Champions League: “Estoy muy ilusionado por esta temporada y estoy deseando quesea igual o mejor que la temporada pasada. Tengo con la confianza de todos y del míster, quien siempre me dice que tenga confianza de cara a portería”.
Sin duda, Vinicius se ha erigido en el líder del Real Madrid sobre el césped, más todavía tras la ausencia de Benzema por lesión. Este domingo, en el Cívitas Metropolitano ante el Atlético de Madrid, todas las miradas estarán puestas en el brasileño.
Hasta el momento, Vinicius ha sido titular en las cinco jornadas de LaLiga disputadas y no se ha perdido ni un solo minuto. Ancelotti confía a ciegas en él, y el joven brasileño le devuelve la confianza con goles: ya lleva 4 en lo que llevamos de Liga.
Otra nota a destacatar, que ha llenado las portadas de los diarios son los bailes del brasileño al anotar.
La polémica se desato cuando Javier Aguirre técnico de un equipo rival pido a uno de sus jugadores que le pegara y lo bajara a como diera lugar.
Eso es lo que el brasileño confesó a Nacho que le había escuchado al entrenador mexicano. Pero hubo más. La otra frase que el mexicano dijo a sus jugadores fue la de “rómpelo”.
Esas palabras del entrenador del Mallorca fueron las que provocaron que Vinicius, en medio del partido, diera la espalda a lo que ocurría en el terreno de juego y se fuera a toda velocidad hacia el banquillo del equipo rival. Su gesto sorprendió por su inesperada reacción y tiene una explicación.
El brasileño escuchó gritos, procedentes del banquillo, que pedían a los que estaban sobre el césped que lesionaran a Vinicius. La reacción fue inmediata y la carrera que el delantero brasileño inició, desentendiéndose del balón, dejaba el rastro de que algo grave había pasado. La presencia y rápida actuación de Toni Kroos evitó que la situación terminara de mala manera. Ancelotti también tuvo mucho que ver en calmar a Vinicius y en evitar que el delantero pudiera estar lamentando lo hecho en esos momentos.