Jürgen Klopp, técnico del Liverpool, se mostró en contra de las tarjetas azules, con las que se castigará con una expulsión de diez minutos a los jugadores que cometan faltas tácticas o protesten las decisiones del árbitro, y dijo que no recuerda “la última vez que la IFAB tuvo una idea fantástica”.
Este nuevo protocolo restringirá las tarjetas azules a las faltas que corten “ataques prometedores” o a las protestas de los futbolistas. Además, un jugador será expulsado del partido si recibe dos tarjetas azules, o una azul y una amarilla (y viceversa).
“¿Tarjeta azul? No me suena como una idea fantástica así de primeras” añadió Klopp.
La opinión del alemán va en comunión con la de otros entrenadores, que mostraron su rechazo este viernes, como es el caso de Mauricio Pochettino, que aseguró que causará más debate y complicará a árbitros, jugadores y aficionados.
Esta medida supondrá la primera vez que se introduce una nueva tarjeta disciplinaria desde la llegada de los cartones amarillo y rojo en el Mundial de 1970.