Con la petición de disculpas al pueblo yaqui, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, culminó las ceremonias de perdón por los agravios cometidos contra los indígenas desde la conquista hasta la actualidad, en las que no ha participado el Gobierno Español.
“El Estado Mexicano no debe permitir nunca más la marginación, los abusos y las injusticias en contra de los yaquis ni de ningún otro grupo étnico o cultural de nuestro país. Primero deseamos ofrecerles perdón”, declaró López Obrador en un acto con el pueblo yaqui, en el estado de Sonora.
Durante el evento, titulado “Petición de perdón a los pueblos originarios”, arremetió especialmente contra la persecución de indígenas bajo la dictadura de Porfirio Díaz (1877-1911), un capítulo que considero “vergonzoso”, y criticó la “concepción racista que se padece desde la llegada de los invasores españoles”.
La intención de López Obrador era que durante las conmemoraciones de 2021 por los 200 años de la independencia de México y los 500 años de la conquista de Hernán Cortes, el Gobierno mexicano, el español y la Iglesia Católica se disculparan por los “agravios” cometidos contra los indígenas.
Pero la carta que envió en 2019 al rey Felipe VI enfrió las relaciones con España, país que ha declinado participar en estos eventos y el lunes cancelo la última hora su presencia en el gran evento del Zócalo capitalino para festejar el bicentenario de la consumación de independencia de México.
El Gobierno español consideró en su momento que “la Llegada hace 500 años de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones espontáneas”.
En cambio, el papa Francisco mandó una misiva en la que reconoció “los errores del pasado” y reiteró su petición de “perdón por los pecados personales y sociales” cometidos por la Iglesia durante la conquista y evangelización del actual pueblo Mexicano.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien días atrás aseguró que “el indigenismo es el nuevo comunismo”, replicó al papa desde Washington que las misiones católicas llevaron la “libertad” a América.
Tras pedir perdón meses atrás en nombre del Estado mexicano al pueblo maya y a la comunidad china- masacrada durante la revolución mexicana-, López Obrador y parte de su gabinete culminaron estas ceremonias haciendo lo mismo ante representantes tradicionales del pueblo yaqui.
“A 488 años de la llegada de los conquistadores a estas tierras del norte de México, venimos hoy a honrar la digna historia de resistencia y dignidad del pueblo yaqui”, declaró Adelfo Regino, director del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.
El presidente mexicano oficializó la cesión de tierras y derechos de agua, cruciales en un territorio muy seco, como parte del Plan de Justicia diseñado por el Gobierno federal y la comunidad yaqui.