La crisis hídrica que vive Brasil, la peor en casi un siglo, ocasionará pérdidas por 8.200 millones de reales (unos 1.464 millones de dólares) en el Producto Interno Bruto (PIB) este año, lo que supone una caída del 0,11 % lastrada por el precio de la energía eléctrica, disparado por la falta de lluvias.
La estimativa es de la Confederación Nacional de la Industria (CNI), que señala que el alto costo de la electricidad también hará que el consumo de los hogares se reduzca este año en 7.000 millones de reales (unos 1.250 millones de dólares), que las exportaciones retrocedan un 0,23 % y que se pierdan al menos 166.000 plazas de empleo en el país, según un estudio divulgado este miércoles.
Las expectativas indican que el PIB industrial, que incluye las industrias extractivas y de transformación, servicios industriales de utilidad pública y la construcción, debe caer un 0,17 % al reducirse en 2.200 millones de reales (unos 392 millones de dólares), frente al que se alcanzaría en Brasil sin el aumento del costo de la energía eléctrica.
La economista de la CNI y autora del estudio, Maria Carolina Marques, indicó que el propio sector eléctrico será el más afectado, porque al crearse un sobrecosto al servicio para que las personas consuman menos se va a reducir la demanda.
También sentirá un fuerte impacto el de alojamiento y hotelería, por cuenta del aire acondicionado y de las duchas eléctricas, consumidos a diario y en altas dosis por los huéspedes.
Tras la retracción económica del 4,1 % en 2020 sufrida por Brasil por la pandemia de coronavirus, las previsiones del Gobierno, el mercado y el Banco Central apuntan para un crecimiento de cerca del 5 %, que podría ser mayor si el país no hubiera sufrido el latigazo de la sequía, que le restará cerca una décima de su potencial expansión, según el estudio de la CNI.
Según el estudio de la CNI, se estima que para 2022 las pérdidas del PIB por la crisis hídrica saltarán hasta los 14.200 millones de reales a precios de 2020 (unos 2.535 millones de dólares), lo que supone un retroceso de 0,19 %.
Asimismo, se prevé la pérdida de unos 290.000 puestos de trabajo, frente al número de personas empleadas entre abril y junio de 2021, que el consumo de los hogares caiga 0,26 %, que las exportaciones se recorten un 0,41 % y que el PIB industrial se contraiga 0,29 %.
Brasil vive momentos catastróficos debido a la sequía, se espera que estos meses puedan ser positivos para ellos.